No esperes a estar fuerte para ofrecer tu fragilidad.
No esperes a conocer para ofrecer
tu ignorancia.
No esperes a estar segura para
ofrecer tu desnudez.
No esperes a estar saciada para
ofrecer tu sed.
No esperes a estar sanada para
ofrecer la sensibilidad que nace de tu herida.
No esperes a ser independiente…
¡te quiero creando fraternidad!
Te quiero como eres, conmigo, en
lo mío, con los míos, con otras… ¡ahora!
Gracias!!! Cuánta verdad
ResponderEliminar