La inseguridad, ilusión e incertidumbre de 'la primera vez' hizo que 15' antes de la hora prevista, ya algunas estuviésemos conectadas y 'probando'.
El que no fuera necesario cancelar otros encuentros y desplazarse hasta aquí, hizo que fuésemos más los que pudiéramos compartir este espacio.
La técnica... esa que, en estos días, se está convirtiendo en compañera que posibilita el acercarnos en la distancia y nos lleva a explorar con creatividad para ir más allá de lo que hasta hace poco eran límites infranqueables.
El tiempo de las presentaciones... amigas, conocidas, antiguas/os alumnas/os, profes... ¡buscadores convocados! Y también los 'presentes ausentes'. Aquellos que ayer no necesitaron un espacio en la pantalla para estar entre nosotros porque sus nombres y sus situaciones están en nuestro corazón. ¡Sed de encuentro! ¡Sed de Vida!
En este tiempo en el que ya 'ver y oír' nos resulta insuficiente porque experimentamos la necesidad de 'oler, gustar y tocar' también la presencia amiga; en este tiempo de ausencias y de transformación de nuestros modos de vida, hay algo, hay Alguien que permanece y se nos descubre como el único cimiento sólido.
¡Paz a vosotros! ¡Que no tiemble vuestro corazón! No porque la realidad sea fácil, no porque vaya a desaparecer la incertidumbre, sino porque escuchamos ese Yo soy y experimentamos que ¡Él es y está!
En Él descansamos. En Él esperamos. Con Él buscamos respuestas creativas. A Él le pedimos ser, también nosotras, testigos de Su paz.
¡GRACIAS POR HACERLO POSIBLE!
Gracias a todos por el compartir. Nos acompañamos en la distancia
ResponderEliminarHa sido una experiencia maravillosa el haber podido compartir ese rato con todas vosotras. Gracias por hacerlo posible.
ResponderEliminarMuchas gracias!! Fue un regalo poder compartir de otra forma
ResponderEliminarMuchas gracias!! Como en casa :) Gracias por prepararlo todo tan bien y con tanto cariño y ayudarnos a tener un buen rato de estar con Él
ResponderEliminarEstar con las Religiosas de Jesús-María es siempre un regalo porque gracias a ellas sientes el abrazo del Señor y ves de cerca cómo en la Tierra, tanta gente, buena trabajan por el Reino. Un beso a todas.
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